¿Por qué un diagnóstico erróneo puede costarte miles de euros?

Aparecen manchas en las paredes de tu casa en Getxo o Sestao, el salón huele a humedad y empiezas a ver moho en las esquinas. Llamas a tu compañía de seguros y, tras una breve visita del perito, sin aportar datos, recibes una respuesta que no esperabas: «Es condensación por falta de ventilación. No está cubierto». Pero, ¿y si te equivocas al aceptar ese diagnóstico? ¿Y si realmente se trata de una filtración que sí debería estar cubierta por tu póliza?

No todas las humedades son iguales

La diferencia entre los distintos tipos de humedades no es un capricho técnico: determina quién asume la responsabilidad y, sobre todo, quién paga la reparación. Como establece el Código Técnico de la Edificación en su documento básico HS1, las humedades por filtración desde el exterior, la envolvente comunitaria, o desde instalaciones tienen un origen muy diferente a las producidas por condensación del vapor de agua interior. Confundirlas puede significar perder una reclamación legítima.

Las humedades por filtración desde zonas comunes o fachadas, presentan señales características: manchas localizadas que empeoran tras las lluvias, deterioro progresivo, cerca de bajantes o en zonas específicas de la envolvente. Es uno de los errores más frecuentes y conflictivos en peritaciones de humedades. De hecho, determinar condensación en casos reales de filtración es una de las estrategias más comunes de las aseguradoras para rechazar reclamaciones.

Síntomas similares visualmente con la condensación:

• Ambas producen manchas oscuras en paredes
• Ambas pueden generar moho
• Ambas aparecen frecuentemente en zonas frías (esquinas, puentes térmicos)
• Ambas empeoran en invierno

La condensación aparece de forma generalizada en zonas frías, especialmente en invierno, con ese característico velo de humedad en cristales y esquinas. Explicado de manera sencilla, es vapor de agua interior que condensa en superficies frías, como en una lata de refresco que acabas de sacar de la nevera un día de calor. Humedad superficial, no en profundidad del muro, que empeora en invierno con calefacción y ventanas cerradas al aumentar el contraste y reducirse la ventilación para evitar perder calor. Se considera defecto constructivo y, por lo tanto, sin cobertura del seguro de hogar.

La capilaridad, una patología menos usual, pero igualmente problemática, afecta las áreas inferiores de los muros con eflorescencias salinas, tal como documenta Carles Broto en su enciclopedia de patologías constructivas. Su tratamiento ha experimentado mejoras con las técnicas más recientes de aislamiento.

El diagnóstico pericial: más allá de lo que se ve a simple vista

Un perito especializado, sobre todo en zona Norte, no se debe limitar a observar la mancha. Utiliza termografía infrarroja para detectar puentes térmicos y zonas de humedad oculta, realiza mediciones precisas con higrómetros calibrados y, cuando es necesario, efectúa catas que revelan el verdadero alcance del problema. Esta metodología técnica es la que marca la diferencia entre aceptar un rechazo injustificado de tu aseguradora y defender tus derechos con argumentos sólidos.

Las videoperitaciones que algunas aseguradoras realizan mediante el propio móvil del asegurado, presentan limitaciones evidentes: en ocasiones luz escasa, imposibilidad de realizar mediciones higrométricas o termográficas, y un análisis superficial que puede llevar a exclusiones erróneas. Una mancha captada por una cámara de teléfono no permite determinar su origen real ni su alcance, y mucho menos justifica técnicamente un rechazo de cobertura.

¿Cuándo necesitas una segunda opinión técnica?

En Euskadi y comunidades limítrofes, conocemos de sobra las condiciones climáticas que tenemos, que favorecen la aparición de humedades, pero también generan confusión en los diagnósticos. Si tu compañía ha rechazado tu reclamación alegando condensación, o si la valoración de los daños no refleja la realidad de tu vivienda, necesitas una segunda opinión técnica independiente.

En SK2 Ingeniería analizamos cada caso con el rigor que merece tu patrimonio. Porque detrás de cada mancha en la pared hay una historia que contar, y nosotros sabemos descifrarla.